La receta de hoy, es muy, muy sencilla de preparar. A mí, además, me encanta. Espero que vosotros la disfrutéis tanto como yo.
¿Qué necesitamos? ( para 6 personas ):
- 6 rebanadas de pan de pueblo
- 200 gr. de champiñones
- 50 gr. de senderinas secas (u otras setas secas)
- ¼ l. de nata de cocinar (18% M.g.)
- 250 gr. de queso rallado (polvo)
- Cebollino
- 50 gr. de mantequilla
- Sal
- Pimienta negra
¿Cómo lo hacemos?:
Remojamos las setas secas unos 30 minutos en agua caliente. Una vez pasado este tiempo, las escurrimos y reservamos.
Limpiamos los champiñones y los cortamos en láminas finas. Los rehogamos con la mantequilla. Cuando lleven unos 5 minutillos, añadimos las setas hidratadas que teníamos reservadas y un poquito de pimienta negra. Cocinamos todo junto otros 5 minutos más (bueno, hasta que esté casi hecho) y entonces añadimos la nata, el queso y el cebollino picadito. Removemos bien hasta que el queso se haya fundido.
Dejamos templar un poco y entonces untamos las rebanadas de pan y metemos al horno a gratinar.
Sólo queda servir y…disfrutar.
Cosicas:
El agua que os quede de hidratar las setas secas, ¡ ni se os ocurra tirarla!. Yo la guardo. Primero la cuelo, utilizando una tela (ya que por un colador pasa la arenilla), y después la echo en cubiteras. La meto al congelador y cuando hago algún guiso de carne, pasta con setas, algún arroz,…la añado; da un sabor impresionante.
Otra cosita, si os sobra crema de setas, podéis utilizarla para hacer un delicioso plato de pasta. Solo tenéis que cocer la pasta, añadir la salsa de setas y un poquito de leche, nata o como os acabo de decir, un poquito del agua de hidratar las setas.